Hay empresas y gobiernos que necesitan pedir dinero prestado. Las agencias especiales les asignan calificaciones crediticias para evaluar su capacidad para pagar la deuda. La AAA es la puntuación más alta, destacando que el riesgo de invertir en esta empresa o gobierno es relativamente bajo.
Las empresas con una calificación crediticia Aaa tienen menos probabilidades de fallar en sus pagos a los inversores, lo que significa que el riesgo de incumplimiento es insignificante. Por lo tanto, atraen a muchos inversores dispuestos a prestarles dinero. Sin embargo, las empresas con calificación AAA tienden a ofrecer a los inversores rendimientos más bajos que otras, ya que el riesgo es menor. Puede que te sorprenda, pero solamente dos empresas en los Estados Unidos tienen una calificación crediticia AAA: Microsoft y Johnson & Johnson.
Standard & Poor's, una agencia de calificación internacional, ha otorgado a 11 países calificaciones crediticias AAA.
Esta lista contiene países con una estabilidad económica excepcional y el nivel más alto de solvencia.
En general, las calificaciones crediticias juegan un papel esencial en el mundo financiero, ya que muestran el riesgo de una inversión. La calificación no solamente puede mejorar, sino también empeorar. De hecho, han habido casos en los que países y empresas pierden sus calificaciones AAA. Por ejemplo, Standard & Poor's bajó la calificación de los Estados Unidos de AAA a AA+ en el año 2011.