En los círculos financieros, el mundo está impulsado por activos. El objetivo es acumular los activos más valiosos para crear y mantener riqueza a largo plazo. Para entender el principio clave de la creación de riqueza, los traders deben saber todo sobre los activos subyacentes y su papel en la gestión de un portafolio.
Un activo subyacente es el valor básico o vehículo de inversión sobre el que operan los derivados. Los activos subyacentes pueden ser valores individuales, como acciones o bonos, o grupos de valores, como en un fondo indexado.
Un derivado es un contrato financiero entre dos o más partes basado en el valor actual o futuro del activo subyacente. Si consideramos mercados ampliamente utilizados, los derivados pueden adoptar muchas formas, como futuros, opciones sobre acciones, swaps y avales. Se tratan de instrumentos de alto riesgo y alta recompensa. Los inversionistas los utilizan para apostar por el valor futuro del activo subyacente. Otro propósito de los derivados es cubrirse contra otras inversiones, buscando reducir el riesgo de inversión. Finalmente, los derivados también son instrumentos especulativos, que pueden aumentar el riesgo de inversión.
Aquí es donde entran en juego los activos subyacentes. Para hacer las mejores apuestas en derivados, los inversionistas tienden a cubrir el riesgo o aumentarlo mediante actividades especulativas en áreas de alto riesgo, como opciones y futuros. Los activos subyacentes que permiten estas apuestas son fundamentales para el proceso de inversión en derivados.
1. Derechos Financieros o Acciones
Una acción es un derecho financiero que representa la propiedad proporcional del inversionista o tenedor sobre los ingresos y los activos totales de la empresa emisora. Las acciones se emiten principalmente para recaudar fondos para financiar operaciones comerciales o proyectos de alto crecimiento. Las acciones pueden ser ordinarias o preferentes.
2. Títulos de Deuda o Bonos
Un bono es un instrumento financiero que otorga a su titular pagos de interés fijo. Las corporaciones y las instituciones gubernamentales emiten bonos para recaudar fondos para financiar proyectos comerciales o gubernamentales. Los tenedores de dichos instrumentos se denominan acreedores de deuda.
3. Fondos Cotizados en Bolsa
Los fondos cotizados en bolsa (ETFs) son tipos especiales de fondos mutuales que tienen como referencia un índice subyacente. De hecho, este es un grupo de valores combinados en una sola unidad.
4. Índice de Mercado
Un índice de mercado es una colección de valores, que se enfoca en un área específica del mercado financiero. Los índices evalúan la efectividad de los mercados financieros y ayudan a desarrollar estrategias de inversión pasiva.
5. Moneda
La moneda es el instrumento de intercambio de dinero que reemplazó al tradicional sistema de trueque. Diferentes países pueden tener diferentes monedas. La moneda más común y popular aceptada en todo el mundo es el dólar estadounidense.
6. Materias Primas
Una materia prima es un instrumento que se utiliza en negocios y actividades comerciales. Estos artículos representan insumos para actividades comerciales generales de comercio y manufactura. El oro y la plata son las materias primas más populares operadas en el mercado de materias primas.
Uno de los derivados financieros más famosos y más operados son las opciones sobre acciones. Las opciones sobre acciones son derivados cuyo valor se basa en el activo subyacente, es decir, las acciones reales. Por ejemplo, una opción de compra sobre una acción le da al comprador el derecho de comprar la acción a un precio específico (precio de ejercicio) hasta que venza la opción.
Obviamente, el valor y el precio de la opción dependen del precio real de las acciones. Para acciones que cotizan a $60 por acción, una opción de compra sobre una acción con un precio de ejercicio de $50 valdría un mínimo de $10 por acción porque la opción de compra le da al titular de la opción el derecho de comprar una acción de $60 por solo $50.
Las acciones, los bonos, las materias primas como el oro, el petróleo o el algodón, las tasas de interés, los índices de mercado y las monedas son los activos subyacentes que han influido en la creación de muchos derivados financieros. Además de las opciones, los derivados más populares incluyen contratos a plazo, swaps de incumplimiento crediticio (CDSs) y obligaciones de deuda garantizada (CDOs).
Los instrumentos financieros derivados se utilizan comúnmente para gestionar el riesgo en una inversión. Por ejemplo, un inversionista que posea múltiples participaciones de una determinada acción puede cubrir su inversión en el activo subyacente – la acción – utilizando opciones de acciones derivadas.
El concepto de activos subyacentes es importante para los especuladores de inversiones que podrían buscar ganancias con el trading de arbitraje en activos subyacentes y derivados, es decir, operaciones diseñadas para beneficiarse de las diferencias de mercado temporales entre el precio del activo subyacente y el precio del derivado, en función de este activo.